La Peña Furada de Carrasconte , que es anterior al santuario, marca el límite entre Babia y Laciana desde los tiempos más remotos. Este supuesto origen como lugar de culto prehistórico es subrayado por su precisa orientación solar con Peña Ubiña en las fiestas de media estación que dan comienzo y fin al verano. La propia orientación del monolito podría señalar el ocaso acrónico de Arturo que anuncia el solsticio de verano.